miércoles, 27 de febrero de 2008

JOAQUÍN NIETO, CANDIDATO DE IU POR MADRID: "IZQUIERDA UNIDA ES LA GARANTÍA PARA MEJORAR LA PROTECCIÓN SOCIAL"

Joaquín Nieto lleva más de treinta años dedicado al sindicalismo en el seno de Comisiones Obreras. En el año 91 accedió a la Comisión Ejecutiva Confederal, en la que ha sido responsable de la secretaría de Medio Ambiente. Dimitió de su cargo en la Ejecutiva para presentarse a las Elecciones como número dos de la candidatura de IU por Madrid. La conversación se celebra el sábado día 23 a mediodía, después del acto público celebrado por la coalición en Alcalá de Henares. Os ofrezco aquí la entrevista, tal como se publicó en Diario de Alcalá el miércoles día 27 de Febrero.

Pregunta.- Le he visto muy preocupado por el voto útil de la izquierda hacia el PSOE. Lo que usted llama el voto del miedo.
Respuesta.- Es que ese voto del miedo no es un voto útil, es absolutamente inútil. Es el voto que busca el Partido Socialista agitando el fantasma del miedo a una hipotética victoria del PP. Nosotros partimos del convencimiento de que Mariano Rajoy no tiene ninguna posibilidad de ganar las elecciones. Y lo que le decimos a la gente es que vote libremente y con alegría por aquellas propuestas que más le gusten. Si le gustan las socialistas, que vote al PSOE; pero si le gustan las nuestras, que vote a IU.

P.- Y temen que una parte del electorado que simpatiza con ustedes, coja la papeleta del PSOE para cerrarle el paso al PP...
R.- Evidentemente. Es lógico que ellos traten de movilizar al máximo a su electorado, pero no nos parece aceptable que el PSOE trate de disputarle el voto a IU con el argumento del miedo. Se comportan con un ventajismo deplorable, porque ellos saben y todo el mundo sabe que competimos con una Ley Electoral que penaliza a Izquierda Unida.

P.- Entonces, ¿se sienten ustedes emparedados entre la Ley Electoral y el ambiente general que empuja hacia el bipartidismo?
R.-Nos han querido emparedar, pero no lo han conseguido. El pluralismo político existe en España y va a seguir existiendo. IU es la garantia de ese pluralismo en particular y del pluralismo más específico que existe dentro del campo de la izquierda. Por otra parte, la Ley Electoral está agotada y ya son muchísimos los sectores que reclaman un cambio. Estoy seguro de que esta reforma estará en la agenda de la próxima Legislatura y contribuirá a que España sea un país más democrático y más políticamente sano.

P.- La última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas les da entre 5 y 6 diputados. ¿ Se sienten satisfechos o se plantean objetivos un poco más ambiciosos?
R.- Nuestro objetivo es consolidar el grupo parlamentario; y mejorar nuestra representación tanto en votos como en número de diputados, con la finalidad de tener la fuerza suficiente para ser decisivos en la negociación del programa de Investidura.

P.- ¿ Qué quieren decir cuando le piden el voto a la gente para que IU sea decisiva en la próxima Legislatura?.
R.- En gran medida ya hemos sido decisivos en la anterior Legislatura, porque casi cincuenta leyes salieron con el respaldo, la influencia o la iniciativa de Izquierda Unida. Ahora lo que queremos es un fuerte respaldo popular para ser muy exigentes en la negociación de un programa de Investidura o de Gobierno que se oriente hacia la inversión pública y la mejora de la protección social, no a la rebaja de impuestos.

P.- ¿Cuáles sería las exigencias mínimas que habría de satisfacer ese Programa de Investidura para contar con el voto de los diputados de IU?

R.- La primera de ellas equipararnos en materia de gasto social con los países más avanzados de la UE. Más inversión pública para dinamizar los sectores productivos. Un plan para rehabilitar medio millón de viviendas protegidas. Cambiar el modelo energético hacia las energías renovables y ejecutar el cierre progresivo de las centrales nucleares. Exigiríamos también la elaboración de una ley de plazos para la interrupción voluntaria del embarazo. Resolver de una vez por todas la cuestión del aborto es una deuda pendiente de la democracia con las mujeres españolas.

P.- En medio de la carrera actual para ver quién promete más rebajas de impuestos, Izquierda Unida apuesta por incrementar la presión fiscal. ¿Lo puede explicar ?
R.- Lo primero que hay que dejar claro es que nosotros no queremos subir esa presión sobre los que menos tienen, sino sobre los que tienen ingresos y patrimonios más elevados y sobre los que más consumen. Y proponemos que se incremente la recaudación del Estado porque estamos 5 puntos por debajo de los países de nuestro entorno. Y eso es lo que explica que también estemos por detrás en gasto social. Sólo cuando la recaudación total sea similar será similar el gasto en protección social.

P.- ¿ Y cuál será la vía para conseguir ese incremento de la recaudación por parte del Estado?
R.- En primer lugar, con planes eficaces para combatir el fraude fiscal. Para hacerse una idea de la dimensión de este problema, basta con recordar que España es el país de la UE con más billetes de 500 euros. Esta lucha contra el fraude, según nuestros cálculos, podría aportar unos 6.000 millones anuales. En segundo lugar nos oponemos a la supresión de los impuestos sobre el Patrimonio y Sucesiones y Donaciones. Son impuestos muy importantes, que deben seguir existiendo, aunque haya unos mínimos exentos, como ocurre con el impuesto de la Renta. Proponemos además un impuesto especial sobre los beneficios extraordinarios de la banca y también los impuestos ecológicos para penalizar el consumo excesivo de recursos naturales, como el agua y la energía.

P.- Ese aumento de recaudación hay que gastarlo luego de acuerdo con un orden de prioridades. Puede que a los ciudadanos de Alcalá una de las cosas que más les interese saber es qué van a hacer ustedes con la Sanidad Pública, dado el malestar causado por el deterioro de la atención en el Hospital Príncipe de Asturias...
R.- Lo primero que nosotros decimos es que resulta inadmisible que el gasto sanitario en España sea un punto inferior a la media de la Unión Europea. Ese punto son 10.000 millones de euros al año. Por lo tanto, lo más prioritario para nosostros es conseguir la convergencia con los países de nuestro entorno en gasto sanitario. Ese incremento de los presupuestos públicos dedicados a la atención sanitaria es tanto más necesario cuanto que se ha producido un importante aumento de la población y también un notable alargamiento de la esperanza de vida. Y, en consecuencia, un aumento de la demanda.

P.- Entonces ese deterioro del que tanto se quejan muchos ciudadanos, ¿ se debe a que los presupuestos se han quedado pequeños para atender las nuevas demandas?

R.- Es evidente que los presupuestos sanitarios tienen que crecer en la medida que crece la población, pero además de esto, en el caso de la Comunidad de Madrid, nosotros consideramos que hay una política deliberada del Gobierno de Esperanza Aguirre para permitir el deterioro de la salud pública. Los presupuestos destinados a la atención sanitaria no sólo no han aumentado, sino que se han reducido. Y ahora el Gobierno Regional promueve la construcción de hospitales por empresas privadas que luego se encargarán de gestionarlos. ¿Qué saben las constructoras de gestión hospitaliaria? Esa política es propia de un Gobierno que sólo se preocupa de dar negocio a sus amigos. Para nosostros la prioridad de las prioridades es frenar ese intento de privatización sanitaria que existe en Madrid.

P.- Decía usted en su discurso que España se enfrenta a un cambio de ciclo económico. ¿ En qué aspectos hay que hacer hicampié para adaptarse a la nueva situación?
R.- Lo primero que habrá que hacer es proteger a los nuevos desempleados y buscarles nuevos empleos, que tendrán que crearse en aquellos sectores que resulten más dinámicos y competitivos en un mundo globalizado. Creemos que España está bien situada en sectores como las energías renovables, la química, la investigación en biomedicina y en todo lo relacionado con la conservación del medio ambiente. Las economías que mejor se adapten a los cambios impuestos por razones medioambientales serán las que más beneficios aporten a sus ciudadanos y las que no se adapten generarán muchos problemas.

P.- Imaginemos una situación en la que, a pesar de sus esfuerzos, IU no consigue ser decisiva después del 9-M. Imaginemos que las alternativas posibles son un Gobierno de gran coalición PP-PSOE, como en Alemania; o un Gobierno de coalición con los grupos nacionalistas. ¿ Qué preferirían?
R.- Un Gobierno de gran coalición sería un fraude para el electorado y un Gobierno de coalición con los nacionalistas sería un fraude para las expectativas de que continúe el cambio emprendido en la anterior Legislatura y siga mejorando la protección social.

martes, 26 de febrero de 2008

LA CARRERA HACIA EL 9-M DESDE EL CÓRNER: RAJOY DEVOLVIÓ LA MORAL DE VICTORIA A LOS SUYOS

Nadie tiene la varita mágica para saber qué ocurrirá en las urnas el día 9 de marzo, pero una cosa es segura después del cara a cara del lunes por la noche: los populares, que habían mostrado un cierto desánimo tras el fracaso de Pizarro frente a Solbes, han recuperado la convicción de que pueden ganar. Incluso pudimos ver caras de euforia en la sede de la calle Génova cuando Rajoy llegó para analizar la partida, como dirían los ajedrecistas.
Antes de ponerme a escribir estas líneas, hice un rápido repaso de titulares en las ediciones digitales de los periódicos y ahí encontré que las primeras encuestas telefónicas daban como ganador a Rodríguez Zapatero. Sin embargo, yo creo que el triunfador fue Rajoy por una razón: estuvo más firme y más convincente en su papel de líder de la oposición que Rodríguez Zapatero en su papel de Presidente del Gobierno. En una democracia, el Gobierno gestiona los asuntos públicos y la Oposición trata de desgastarlo poniendo de relieve los aspectos oscuros, contradictorios o fracasados de esa gestión. Esas son las reglas del juego. Y, de acuerdo con esas reglas, a mí me parece que Rajoy estuvo mejor en la crítica que Rodríguez Zapatero en la defensa.
Los dos demostraron que llevaban la lección bien estudiada y, en gran medida, reprodujeron los argumentos, los reproches y las acusaciones que tantas veces hemos podido oirles en los debates parlamentarios de estos últimos cuatro años. Pero creo que muchos de los ciudadanos que vieran el encuentro del lunes en los pabellones de Ifema estarán de acuerdo conmigo en que el Líder de la Oposición consiguió sorprender al Presidente del Gobierno. En mi opinión, Rodríguez Zapatero, se confió demasiado por la facilidad con que Pedro Solbes había logrado rebatir los argumentos de Manuel Pizarro, pero se encontró con un Mariano Rajoy que exhibió la mejor versión de sí mismo. Posiblemente, a ese exceso de confianza contribuyeron otras dos cosas: un balance de Legislatura que está ahí y que, objetivamente, es más que razonable; y sus repetidas victorias frente a Rajoy en los debates parlamentarios sobre política general. Y el candidato del PP supo aprovechar la relajación de su oponente para colocar golpes precisos y potentes allí donde más dolía: las subidas de precios escandalosas, el fracaso de los alquileres, la inmigración, el fiasco de la negociación con ETA, la ruptura del consenso en política territorial...
En cierto modo, lo ocurrido el lunes por la noche me recuerda lo que ocurrió en 1.993, cuando el primer debate entre Felipe González y José María Aznar. El entonces líder del PSOE, que llevaba once años en el poder y tres mayorías absolutas consecutivas, pensó que Aznar no le duraría un asalto, pero acabó descubriendo, con asombro y desconcierto, que no hay enemigo pequeño. Y eso mismo quedó perfectamente demostrado en los alegatos finales del lunes, cuando Rajoy propuso que "la niña que nace en España ( a mi juicio debería haber dicho "los niños" ) tenga una familia, una vivienda y unos padres con trabajo". Síntesis casi insuperable frente a un Rodríguez Zapatero que se comprometía a trabajar con fuerza y humildad "para que todas las personas tengan las mismas oportunidades" y se despedía con un "buenas noches y buena suerte", que está copiado de la famosa película dirigida e interpretada por George Clooney.
El momento más tenso de la noche fue el rifirrafe a propósito de las gentes de la cultura y las víctimas del terrorismo. Se inició cuando Rodríguez Zapatero reprochó a Rajoy su desprecio por los intelectuales y artistas que apoyan la candidatura socialista y añadió que "usted no merece ser el Presidente del Gobierno por haber llamado untados a las gentes de la cultura". A continuación, Rajoy acusó a Rodríguez Zapatero de haber agredido a las víctimas del terrosimo, cosa que el Presidente negó y calificó de inaceptable. Otro momento duro fue cuando se culparon recíprocamente de haber provocado la discordia que ha presidido la Octava Legislatura. "Usted fue quien firmó el Pacto del Tinell -dijo Rajoy- en el que queda reflejada la obsesión por dejar fuera de juego a media España; usted es el que ha sembrado la discordia al pactar con radicales y extremistas". Y Rodríguez Zapatero respondió que "la discordia la sembraron ustedes al grito de ¡se rompe España!; el problema es que ustedes no han querido colaborar y España tenemos que construirla entre todos, porque este es un país diverso".
El formato del debate estaba pactado hasta los últimos detalles. Sin duda es un gran logro que se haya recuperado esta práctica después de 15 años, pero su propio desarrollo, con cinco bloques tasados, con tres intervenciones por bloque, también tasadas, demuestra lo mucho que nos queda hasta llegar a unos debates más agiles, más espontáneos y, en definitiva, más útiles para los ciudadanos. Si el encuentro entre Solbes y Pizarro estuvo presidido por la caballerosidad, el de Rodríguez Zapatero y Rajoy lo estuvo por la acritud. Queda un segundo debate antes de que los ciudadanos decidan a cuál de los dos prefieren en La Moncloa. Antes del lunes se había dicho que un factor seguro a favor del Presidente era su telegenia, pero yo creo que en este apartado hubo empate. Rodríguez Zapatero ha perdido el rostro angelical que le permitió decir hace cuatro años "el poder no me va a cambiar" y sus cejas parecen cada vez más puntiagudas; y Mariano Rajoy, que tiene una sonrisa muy perjudicada por su afición a los puros, la contrarrestó con una corbata roja que parecía decir "con corazón". Me fui a la cama convencido de que se ha ganado el derecho a seguir siendo el líder del PP, pase lo que pase el 9-M


domingo, 24 de febrero de 2008

LA CARRERA HACIA EL 9-M DESDE EL CÓRNER: ¿MÁS DINERO EN LOS BOLSILLOS O MÁS PROTECCIÓN SOCIAL?

No existe en España inauguración oficial de algo que no se adorne con lo que eufemísticamente llamamos "un vino español". Así que, dada la contrastada afición de los nacionales por los placeres de la buena mesa, era de cajón que el arranque oficial de la campaña para el 9-M tuviera como aperitivo las cosas de comer. Y de las cosas de comer, o sea, de la economía en todas sus vertientes, hablaron en Antena 3 Pedro Solbes y Manuel Pizarro. Una exquisita caballerosidad presidió el intercambio dialéctico entre el candidato socialista, que aspira a seguir al frente del Ministerio de Economía con liderazgo e ideas fuertes, y el candidato popular, que quiere sustituirle con el argumento de que el liderazgo, la confianza y la seguridad están en las manos del PP.
Se dice muy a menudo que, en materia de política económica, las habas están contadas, dados el modelo socioeconómico y el contexto internacional en que nos movemos. De modo que la coincidencia en los atuendos que les eligieron sus asesores venía a ser como la metáfora perfecta de la imposibilidad de aplicar recetas muy diferentes. Existe desde hace tiempo, entre los expertos en imagen, el convencimiento de que, para quedar bien en televisión, no hay nada como una adecuada combinación de tonos azules. Y con su adecuada combinación de tonos azules se presentaron en el plató Solbes y Pizarro, Pizarro y Solbes. Sólo las rayas de la corbata del número dos del PP por Madrid marcaron la diferencia, una pequeña diferencia.
¿Quién ganó el debate? Esta es la pregunta inevitable en encuentros de esta naturaleza. Yo tuve la impresión de que lo había ganado Solbes antes de que Matías Prats diera el resultado de una encuesta en la que el 47 por ciento de los espectadores de Antena 3 daban la victoria al socialista y el 37 por ciento al popular. El Vicepresidente del Gobierno se presentó armado con el bagaje de toda una vida al servicio de la Administración Pública y acorazado con el arsenal de datos que le habían preparado sus colaboradores. Quien tiene a su disposición todo el aparato del Ministerio cuenta de partida con toda la ventaja que supone jugar en casa. Pizarro se mostró como un aspirante correoso, combativo, pero un poco verde y un poco huérfano de datos. A veces dio la impresión de irse por los cerros de Úbeda, por ejemplo cuando propuso "no pagar a terroristas" para reducir el gasto público o cuándo le preguntó a Solbes "si apoya a la familia o apoya algún otro tipo de elementos alternativos". ¿ A qué demonios se refería Pizarro con eso de los elementos alternativos?
El debate se dividió en tres bloques: las grandes cifras, la economía familiar y las propuestas de futuro. Veinte minutos por bloque, con tres intervenciones por cada parte. Todo muy encorsetado y muy medido, según el pacto a que habían llegado los dos partidos. Para mí el momento culminante fue en el segundo bloque, cuando Solbes acusó a Pizarro de ser partidario de privatizar el sistema de pensiones. El hombre de Rajoy para Economía lo negó una y otra vez, lo negó tercamente, como buen aragonés que es, pero allí estaba Solbes enseñando triunfalmente a la cámara las declaraciones de hace 14 años, en las que su oponente se declaraba partidario de las pensiones privatizadas. Con las cosas de comer no se juega, señor Pizarro, parecía decir el Vicepresidente Económico cada vez que reclamaba rigor y seriedad en el tratamiento de los datos.
Pero quizá lo más relevante no es quién ganó o dejó de ganar el debate ( por cierto, fue muy aleccionador ver cómo los representantes de los periódicos que apoyan a la derecha se inclinaban en bloque por la victoria de Pizarro, mientras los que prefieren la victoria del PSOE proclamaban, igualmente en bloque, el triunfo de Solbes). Lo más relevante, lo que de verdad importa, es qué opción de las presentadas tiene más ciudadanos detrás una vez escuchados los argumentos. El PP cree más en el mercado libre y, en consecuencia, se compromete a bajar los Impuestos para que los ciudadanos tengan más dinero en sus bolsillos; el PSOE, por el contrario, promete más protección social y, en consecuencia, alega que los recortes impositivos de los populares pondrían en peligro la inversión pública y el gasto social. En defensa de la primera de esas opciones, Manuel Pizarro dijo que España no va bien, que somos los campeones europeos de la inflación, que se está destruyendo empleo y que el mayor riesgo para la situación económica actual es que siga el Gobierno socialista. Y en defensa de la segunda opción, Pedro Solbes dijo que tenemos tres millones más de personas trabajando, que no hay crisis sino que son los populares quienes la convocan, que las exportaciones españolas no han perdido cuota de mercado, que la renta per cápita se ha incrementado en cuatro mil euros y quien está mejor preparado para capear el temporal que ahora se anuncia es el PSOE y no el PP.
En
algunos comentarios se ha dicho que fue un debate aburrido. A mí me pareció apasionante, porque durante algunos años me gané la vida haciendo información económica y disfruto mucho cada vez que veo a alguien manejando con solvencia y precisión las grandes cifras macroeconómicas. Además, el cara a cara tuvo un final muy divertido, cuando Matías Prats, con su fino sentido del humor, reconoció que "jamás un moderador tuvo menos trabajo que yo esta noche".

jueves, 21 de febrero de 2008

LA CARRERA HACIA EL 9-M DESDE EL CÓRNER: ¿LAS ELECCIONES MÁS REÑIDAS DE LA DEMOCRACIA?

La última encuesta del Centro de Investigaciones Sociológicas pronostica para el 9-M una victoria del Partido Socialista por tan sólo 1,5 puntos de diferencia. De ser ese el resultado final, la diferencia entre el partido del Gobierno y el primer partido de la Oposición sería de unos 6 diputados, teniendo en cuenta que tanto PSOE como PP obtienen casi cuatro escaños por cada punto de respaldo electoral en las urnas. Por ejemplo, en 2.004 el PSOE, con el 42,6 por ciento del voto, obtuvo 164 diputados; y el PP, con el 37,4, consiguió 148. En esta ocasión, el CIS atribuye al Partido Socialista entre 158 y 163 escaños y al PP entre 153 y 157. Falta todavía toda la campaña electoral propiamente dicha y faltan los debates cara a cara, de modo que pueden pasar muchas cosas de aquí al segundo domingo de marzo. Pero, si el CIS acierta, estaríamos, en efecto, ante el resultado más estrecho en toda la historia de la democracia española. Hasta ahora, ese récord corresponde a las Elecciones del 96, ganadas por el PP de José María Aznar con una diferencia de 15 escaños.
Estamos, pues, ante una situación de empate técnico, en la que, como decía el sociólogo José Juan Toharia en un artículo publicado en El País, "el partido está aún por jugar y su resultado dependerá del número de ciudadanos que finalmente decidan bajar a la cancha electoral para participar en el mismo". Otra característica destacable de la encuesta del CIS es que resulta del todo coherente con las que ha venido publicando a lo largo de toda la Legislatura y que, sistemáticamente, nos decían lo mismo: el Partido Socialista, a pesar de los logros indiscutibles de su gestión, no consigue despegarse del PP en intención de voto. Es verdad que ha habido momentos de mayor ventaja, pero, en general, el llamado empate técnico ha sido la nota dominante en el período 2.004-2.008. Cabe recordar, a este respecto, lo ocurrido en las Municipales de 2.007: el PP ganó en número total de votos, aunque el PSOE viera aumentar su poder local y autonómico gracias a los pactos postelectorales.
Por todo lo dicho anteriormente, resulta incomprensible la descalificación que se ha hecho de los datos del CIS desde algunos sectores. Por ejemplo, el diario El Mundo, que apuesta descaradamente por un triunfo del PP, decía en su editorial del sábado día 16: "hay razones legítimas para sospechar que el considerable acercamiento del PP que refleja el sondeo guarda relación con esa estrategia de la tensión y la dramatización de Zapatero, que cree probablemente que su victoria depende de la movilización de la izquierda". Y Gaspar Llamazares, en un desayuno celebrado el lunes día 18, aseguraba que "todos en el interior del PSOE son conscientes de que el 9-M habrá en las urnas una mayoría socialista, pero siguen dramatizando porque quieren la mayoría absoluta".
Al líder de IU quizá se le puede disculpar porque se está jugando su propia supervivencia política y además tiene motivos de sobra para quejarse de un sistema que empuja desaforadamente hacia el bipartidismo, un sistema tan injusto que apenas otorga a su formación un escaño por cada punto de voto popular, es decir, una cuarta parte de los que concede a los grandes. Pero en el caso de los medios de comunicación, no hay disculpa posible para unas descalificaciones que son tanto más contradictorias cuanto que ellos mismos han venido informando a lo largo de cuatro años sobre la persistente igualdad PSOE-PP en intención de voto.
Esa igualdad, más acusada aún que la que se dió en el 96, va a obligar a los contendientes a poner toda la carne en el asador en lo que nos resta de campaña. Un ejemplo insuperable de esa estrategia de recurrir a todas las armas disponibles, nos la ofrecía el diario El País, que quiere la vitoria del PSOE, en su edición del pasado domingo. Millones de lectores pudieron ver una portada dominada de arriba abajo por una extraordinaria fotografía de la extraordinaria Marisa Flórez. Una fotografía de corte familiar, directa al corazón de unos electores que acababan de celebrar San Valentín, y en la que aparecía un relajado y sonriente ZP amorosamente abrazado por una bella y aún más sonriente Sonsoles Espinosa. Una foto impagable. Es conocida la aversión de la esposa del Presidente del Gobierno por la pompa y circunstancia de la vida pública. Pero, llegada la hora de la verdad, parece decidida a emplearse a fondo para ayudar a su marido. El periódico dirigido por Javier Moreno promete para el próximo domingo un perfil similar del líder del PP. Ya veremos si resulta igual de favorecedor. De momento, lo único que podemos decir, queridos amigos, es que esa foto de Rodríguez Zapatero y Sonsoles Espinosa a toda plana es la foto que todo hombre, y supongo que toda mujer también, desearía tener siempre a mano para mirarla despacio en las duras encrucijadas de la vida.
CAIXAFORUM SE ESTRENA CON EL ESPÍRITU DE GRECIA Y ROMA EN EL PASEO DEL PRADO

Casi al mismo tiempo que la apertura oficial de la campaña electoral, se inaugura en el Paseo del Prado una exposición con las esculturas de Igor Mitoraj, un artista que trata de recuperar la filosofía que inspiró el arte de Grecia, de Roma y de los grandes maestros del Renacimiento. Las obras de Mitoraj, de tamaño gigantesco y marcado carácter arqueológico, se nos antojan restos mutilados de algún naufragio de las naves griegas o romanas, y nos invitan a una reflexión sobre esa búsqueda de la belleza que ha impulsado a los creadores de todos los tiempos. Con esta exposición, comienzan las actividades de CaixaForum, el nuevo centro social y cultural de La Caixa en la capital de España. El edificio, lleno de alardes técnicos, ha sido construído en el solar que ocupó, a principios del siglo XX, una central eléctrica que suministraba energía a la zona sur de Madrid.

lunes, 18 de febrero de 2008

DIEGO LÓPEZ GARRIDO: "SÓLO EL PSOE TIENE CREDIBILIDAD PARA SEGUIR MEJORANDO LA VIDA DE LA GENTE"

En días pasados, el portavoz del Partido Socialista en el Congreso tuvo la amabilidad de concederme una entrevista para Diario de Alcalá, un periódico local que se publica en Alcalá de Henares. Como sabéis por lo que decía en la entrada "fundacional" de este cuaderno de bitácora, en la villa complutense están mis lectores favoritos. Os ofrezco aquí un extracto de la conversación con López Garrido, que se produjo en la mañana del viernes, día 15 de febrero, al tiempo que el CIS hacía públicos los datos de su última encuesta, en la que pronostica empate técnico entre socialistas y populares.

Pregunta.- ¿Le ha sorprendido esa escasísima diferencia entre socialistas y populares?

Respuesta.- No tiene mucho sentido preocuparse por interpretar las encuestas. Lo que importa de verdad es lo que digan los ciudadanos el día 9 de Marzo. Y yo estoy seguro de que la mayoría sabrá apreciar los avances extraordinarios conseguidos por España en la pasada Legislatura.
P.- Rodríguez Zapatero ha reconocido que les viene bien un cierto grado de tensión política para movilizar a su electorado...
R.- Sinceramente, lo que dijo en su conversación con Iñaki Gabilondo me parece de Perogrullo; y no sé por qué algunos se escandalizan tanto. Las campañas electorales están pensadas para eso. Para aumentar la tensión competitiva entre partidos que pugnan por obtener la confianza de los electores. Así aumenta la participación y nosotros queremos que haya la mayor participación posible.
P.- Entonces, esa tensión política de la que hablaba Rodríguez Zapatero no tiene nada que ver con la famosa crispación...
R.- Absolutamente nada que ver. Una cosa es la competición entre fuerzas políticas y otra la crispación que ha promovido el PP con su discurso catastrofista. La crispación provoca el hastío de la gente, invita al abstencionismo. Y el PP quiere justo lo contrario que nosostros, es decir, que haya la menor participación posible.
P.- ¿Y la irrupción de la jeraquía de la Iglesia en contra el Gobierno y casi pidiendo el voto para el PP puede influir en esa movilización de los electores?

R.- No lo sé. No tengo ni idea. Pero me parece que lo ideal sería que la Iglesia católica no hubiera tenido esa actuación, con independencia de que favorezca o no favorezca al Gobierno. Nosostros hemos querido poner las cosas en su sitio. Porque lo que no puede decir la Iglesia es que la democracia se disuelve porque determinadas leyes, como la del matrimonio homosexual, amplían los derechos de la gente. Y lo que no puede hacer es utilizar la negociación con los terroristas de una manera tan hipócrita, porque ellos han hecho de intermediarios en otros intentos de diálogo que también fracasaron.

"NO NEGOCIAREMOS NINGUN ACUERDO POLÍTICO SOBRE BASES INCONSTITUCIONALES"

P.- Una pregunta más al hilo de la tensión política y la movilización electoral. ¿ Qué le ha parecido la solución que se han encontrado para los debates cara a cara?
R.- Muy buena. Es la que proponíamos los socialistas. Era inaceptable la propuesta del PP para limitar un asunto como este, que es de interés general, a sólo dos televisiones privadas y marginando al resto y sobre todo a la Radiotelevisión pública. En realidad, el PP se ha estado resistiendo porque, cuando ellos gobernaron, se suprimieron los debates en televisión; y ahora que gobernamos los socialistas, vuelve a haber debates.
P.- Hablábamos hace un instante de terrorismo. ¿La credibilidad de Rodríguez Zapatero como gobernante no se ha visto dañada después de reconocer que siguieron los contactos con ETA tras el atentado de la T4?
R.- Lo que yo puedo decir es que este Gobierno ha sido transparente. Es el primero en la historia de la democracia que va al Parlamento y plantea la necesidad de una autorización para el diálogo. Y ese diálogo se inicia a raíz de un tregua permanente por parte de los terroristas, y cuando llevábamos tres años y medio sin ningún asesinato. El Gobierno tenía no sólo el derecho, sino la obligación de explorar la posibilidad de poner fin a esta lacra. Es hipócrita negarlo, porque cualquier Gobierno habría hecho lo mismo. Y con la bomba de la T-4 se acabó el proceso de diálogo; y el Gobierno ha sido implacable contra los terroristas, como demuestran los hechos.

P.- Pero precisamente las críticas a Rodríguez Zapatero se basan en que dijo que el diálogo se había acabado y luego ha reconocido que los contactos siguieron a través de mediadores internacionales...
R.- Bueno, los dirigentes del PP deberían ser más prudentes y más cautelosos en sus críticas al Gobierno a la luz de los hechos. Nunca se sabe lo que puede pasar, pero en la última legislatura del PP hubo 240 muertos por actos terroristas y en la legislatura de Rodríguez Zapatero tan sólo 4 muertos. y ahí están los muchos atentados que se han evitado. La actuación del Gobierno ha sido impecable. Y la realidad incontestable es que hoy somos más fuertes contra el terrorismo.
P.- ¿ Y también ha sido impecable la actuación contra formaciones como ANV y PCTV, que apoyan a los terroristas? Mucha gente piensa que el Gobierno ha actuado de forma oportunista al pedir ahora su ilegalización, cuando les permitió presentarse a las Municipales.
R.- Es que en este terreno no se actúa por un principio de oportunidad política, sino por un principio de legalidad democrática. Y a mí me parece que la actuación del estado de derecho ha sido exquisita. Porque hay que recordar que quien inicia el proceso de ilegalización no ha sido el Gobierno, sino el poder judicial independiente; y lo ha hecho cuando disponía de pruebas e indicios suficientes, obtenidos después de las últimas detenciones.
P.- Imaginemos que Rodríguez Zapatero necesita los votos del PNV para conseguir la investidura y ellos ponen encima de la mesa, como decía Iñigo Urkullu el otro día, el llamado derecho a decidir. ¿Qué responderían ustedes?
R.- Que eso es inconstitucional y ellos lo saben. Y saben de sobra cuál sería la respuesta: el Plan Ibarretxe es inconstitucional y nunca aceptaremos un pacto basado en planteamientos que se salen de la Constitución. Repito, nada que sea inconstitucional va a ser objeto de acuerdo con ningún partido político.
P.- Antes de la investidura, hay que ver los programas. ¿Qué propuestas pueden ser las que inclinen la balanza de uno u otro lado?
R.- A mí me parece que una cosa decisiva es la credibilidad. Se puede prometer la Luna, y el PP está haciendo promesas, a cual más extremista, con tal de conseguir titulares de prensa. Pero la gente no te va a votar por eso, la gente te va a votar si confía en tí.
Los votantes no pueden confiar en los mismos que promovieron el Decretazo, fueron a la guerra de Irak o gestionaron de forma miserable la crisis ocasionada por los atentados del 11M.
P.- ¿A qué se refiere cuando habla de promesas extremistas?
R.- Me refiero, por ejemplo, a la política sobre inmigración. El PP lo que quiere es convertir a los inmigrantes en un estorbo, quiere retirarles los derechos; y nosostros defendemos una política basada en los mismos derechos y las mismas obligaciones para los extranjeros que viven con nosotros.
P.- ¿ Y qué prometen los socialistas para ganarse la confianza de los ciudadanos?
R.- Lo que nosotros decimos es: queremos consolidar el cambio profundísimo experimentado por España en estos cuatro años. Queremos seguir expandiendo los derechos ciudadanos, aplicar las leyes sociales que hemos aprobado, y recuperar la senda del crecimiento económico. En definitiva, seguir mejorando la vida de la gente. Y el partido que tiene credibilidad para llevar a cabo todo eso es el PSOE, que lo ha impulsado a lo largo de todo el mandato; y no el PP, que ha estado sistemáticamente en contra.


P.- ¿ Y no temen que los malos datos económicos de última hora influyan más que el balance de toda la Legislatura?

R.- Yo creo que no, porque eso es como si vas ganando ocho a cero y al última hora te meten un gol. No por eso deja de ser una gran victoria. Es verdad que a última hora ha subido el número de parados y se ha incrementado la inflación. Pero ahí están los tres millones de empleos creados. Y eso significa tres millones de familias que han visto mejorar su situación. Y ahí están el saneamiento de las cuentas públicas, que ahora permitirá devolver 400 euros a los ciudadanos; ahí están las leyes sociales, como la de Ayuda a las personas Dependientes; y ahí está la mejora del Salario Mínimo Interprofesional. Y lo que queremos es consolidar y profundizar todo eso, si los ciudadanos nos dan su confianza.


jueves, 14 de febrero de 2008

LA CARRERA HACIA EL 9-M DESDE EL CÓRNER: NACIONALIDADES, ESCUELAS Y CORDONES SANITARIOS

La voluntariosa Rosa Díez, que le disputó a ZP el liderazgo del PSOE en julio del año 2.000, ha puesto el dedo en la llaga: uno de los problemas más graves de nuestros sistema electoral es el excesivo protagonismo que concede a los partidos nacionalistas. Díez, que fue durante años consejera del Gobierno Vasco y luego eurodiputada, lucha ahora a brazo partido por su supervivencia política. Lo tiene muy crudo y ella lo sabe. Por eso, ha señalado también otros defectos del sistema actual: los pequeños partidos de ámbito estatal tienen casi imposible el objetivo de conseguir representación parlamentaria, los bancos se resisten a concederles créditos y su presencia en los espacios electorales gratuitos es poco menos que inexistente.
Estamos, pues, muy cerca - en realidad, lo hemos estado siempre- de aquel paraíso bipartidista que tanto soñaba y predicaba Manuel Fraga. Lo malo es que los dos grandes astros de esa constelación bipartidista se ven rodeados por una pléyade de pequeños asteroides nacionalistas, encantados con el panorama que se les ofrece y siempre dispuestos a incrementar sus exigencias. Esas exigencias, a muy corto plazo, podrían concretarse en la propuesta de que la Presidencia del Congreso, por primera vez en la historia de la democracia, pase a manos de un nacionalista. Es una aspiración perfectamente legítima, aunque no respaldda por los votos populares, que los portavoces de GALEUSCAT (nacionalistas gallegos, vascos y catalanes ) pactaron en su reunión del pasado día 13 en Madrid. "Nosotros también jugamos este partido", dijeron al salir de la reunión. Y, en efecto, lo juegan a fondo.
Volviendo a los avatares de la Unión para el Progreso y la Democracia, hay que decir que se plantea objetivos muy ambiciosos. Demasiado ambiciosos, quizá, dadas las circunstancias. Proponen, por ejemplo, suprimir de la Constitución toda referencia a las nacionalidades que se integran en España. Este asunto de las nacionalidades y las realidades nacionales ha dado lugar, en la legislatura recién concluida, a redacciones que no habrían superado un examen de sexto de primaria. Pero me atrevo a decir que esa pretensión del partido de Díez y Sabater, es imposible, porque exigiría una reforma constitucional; y ya se ha visto que ese melón es mejor no abrirlo, salvo que sea para asuntos en los que haya amplio consenso, como podría ser la supresión de los privilegios del varón frente a la mujer en la sucesión al Trono de España. La UPD propone asimismo otras reformas para evitar que la formación de las mayorías parlamentarias -cuando ninguno de los grandes tiene la mayoría absoluta- esté siempre en manos de los nacionalistas. La UPD quiere, como proponíamos aquí en una entrada anterior -y como ha defendido el catedrático emérito Gregorio Peces-Barba- aumentar hasta 400 el número de diputados y que los escaños adicionales se elijan en una sóla circunscripción de ámbito estatal.
Esa circunscripción estatal no gustaría nada a los nacionalistas, que sin embargo han acogido con grandes elogios la idea de abrir en Madrid un colegio en el que se pueda estudiar en catalán. Con esta iniciativa, la sagaz Esperanza Aguirre ha logrado "pillar" a más de uno con el paso cambiado: les parece muy bien la posibilidad de una enseñanza bilingüe en Madrid, pero en cambio consideran que "en Cataluña no hay problema y el catalán debe seguir siendo la única lengua vehicular de la enseñanza". El propio President Montilla, consciente de lo que eso significa, ha decidido enviar a sus hijos a un colegio privado. Como no vivimos en Cataluña, a lo peor tenemos una visión deformada. Pero desde este lado del Ebro lo que se ve más lógico es que, si Cataluña, es una sociedad bilingüe, la mitad de las asignaturas se den en catalán y la otra mitad en castellano. O mejor aún, si de verdad quieren gastarse el dinero en algo útil: catalán, castellano e inglés, a razón de un tercio cada uno. Siempre me ha parecido incomprensible que los socialistas, cuando se negoció el nuevo Estatuto, aceptasen la erradicación de la lengua común de todos los españoles en las escuelas públicas de Cataluña. Debe de ser que confían en la ciencia infusa, pero la ciencia infusa, como se han encargado de demostrarnos los diputados más jóvenes de Esquerra, tiende a ser insuficiente.
No seré yo quien niegue la aportación positiva que algunas formaciones nacionalistas han hecho a la gobernación del Estado, especialmente en los ámbitos de las políticas económicas y sociales. Pero son maestros consumados en la aplicación de la ley del embudo. Véase su insoportable insistencia en las llamadas balanzas fiscales y en el llamado expolio fiscal de Cataluña. Ahora, al hilo de su exigencia para hacerse con la Presidencia del Congreso, el "moderado" Artur Más ha dicho que las fuerzas integradas en GALEUSCAT serán "un cordón sanitario contra el virus centralista que representan populares y socialistas". Necesitamos un cordón sanitario, sí, para reducir a su verdadera dimensión a un conjunto de fuerzas políticas que, sumadas, apenas representan al 10 por ciento del electorado español.
Y mientras tanto, los dos principales contendientes en esta carrera hacia el 9-M han señalado, cada uno por su cuenta, dos aspectos que pueden tener una incidencia importante. ZP ha reconocido que a los socialistas les viene bien un cierto grado de tensión dramática para movilizar a su electorado, porque piensan que una abstención alta puede beneficiar al PP; y Rajoy, que viajó a Berlín para granjearse la protección de la señora Merkel, volvió anunciando un descubrimiento asombroso y preocupante: un litro de leche sale más barato en los supermercados alemanes que en los supermercados españoles. Ojo al dato, porque la media de los sueldos alemanes es, como mínimo, un 30 por ciento superior a la media española.

martes, 12 de febrero de 2008

"EL NIÑO DE LOS MONTES": TOROS Y GUERRA CIVIL EN LA PRIMERA NOVELA DE MANUEL DE RAMÓN

"En esta novela he querido reflejar mis dos grandes pasiones, que son el mundo de los toros y el estudio y conocimiento de las circunstancias que llevaron a la Guerra Civil". Con estas palabras resumía Manuel de Ramón, en la noche del pasado lunes, la intención que le llevó a escribir "El Niño de los Montes", un relato trágico en el que se narra la peripecia de un aprendiz de torero que intenta cambiarse de bando durante la contienda fratricida que ensangrentó nuestro siglo XX y acaba ante el pelotón de fusilamiento. Pero en esta historia de perdedores se refleja también , por lo que he podido leer hasta ahora, al menos una tercera pasión: la pasión por el idioma, por el manejo primoroso del lenguaje, que a fin de cuentas es la materia prima de la que se alimenta el arte literario.
Manuel de Ramón ha sido periodista durante muchos años en Radio Nacional de España, una tarea que compaginó con la de profesor en la Universidad Europea de Madrid. Obtuvo el Doctorado con una tesis titulada La Información Económica en Radio y posteriormente ha escrito otros dos libros: Madrina de Guerra. Cartas desde el frente ( 2003, en colaboración con Carmen Ortiz ) y Los Generales que salvaron la Democracia ( 2007 ). El Niño de los Montes es su primera novela y ha sido publicada por la editorial Espejo de Tinta. Rosa López, Directora de la editorial, aseguró en la presentación que, aunque Espejo de Tinta se orienta a la publicación de libros que no son de ficción, la narración de De Ramón le gustó tanto que decidieron publicarla.
En la presentación participó también Inmaculada Chacón, compañera del autor en las tareas docentes. Chacón aseguró que "aunque el autor se oculta tras el narrador de la historia, lo cierto es que en muchos pasajes he escuchado la voz de Manolo, he leído sus juicios, he captado sus guiños, he reconocido sus vivencias, sus reflexiones, e incluso alguno de sus trucos y consejos". A su juicio, en esta novela inspirada en hechos reales, o cuando menos en recuerdos reales, se convierte la verdad histórica en ficción, porque De Ramón está contándonos sucesos verídicos haciéndonos creer que todo es producto de la imaginación. "Qué bien has contado la historia; enhorabuena, torero", concluyó Chacón, aludiendo a las muchas referencias taurinas de la novela y a la afición indeclinable que el autor heredó del padre banderillero.
Otro de los participantes en la presentación fue Carlos Fonseca,periodista y escritor, que ha narrado la historia de Las 13 Rosas, recientemente llevada al cine. "Bienvenida sea una novela como esta, dijo Fonseca, que no sólo es ficción, sino que nos ayuda a recuperar una parte de nuestra historia a través de la figura de este maletilla, Ciriaco, El Niño de los Montes, que podríamos considerar representativa de esos millones de historias con minúsculas, sin las cuales no sería posible esa Historia con mayúsculas que protagonizan los grandes hombres".
En su turno de palabra, Manuel de Ramón explicó que "El Niño de los Montes" es una novela construída a partir de las vivencias y recuerdos que le contaba Pedro Rodríguez, un banderillero amigo de su padre, en el barrio de Carabanchel, muy cerca de la plaza de toros de Vista Alegre. A la memoria de ambos -Pedro Rodríguez y Manuel de Ramón padre- está dedicado este libro en el que quizá los pasajes más logrados son aquellos en que se refleja la soledad, el miedo y la zozobra de un hombre que se arriesga a buscar un destino mejor y acaba atrapado en la peor de las fatalidades.
Después de los elogios que le habían dedicado Chacón y Fonseca, De Ramón comentó con cierta sorna que no iba a ser él quien señalara los defectos de la novela. Tampoco yo, que estoy muy lejos de ser un crítico literario, me atrevo a señalar defectos, pero sí creo que el título no está a la altura de lo que luego se nos cuenta, y cómo se nos cuenta, a lo largo de casi trescientas páginas. Y espero que no se me enfade mi amgio Manuel, con quien he compartido tantas horas de trabajo y también algunas de asueto y diversión. A mi juicio, "El Niño de los Montes" no funciona, ni como nombre artístico ni como título de una novela. Demasiado inconcreto, me parece, ese "de los Montes". Puesto que el personaje central es originario de la provincia de León, a lo mejor habría sido más contundente, y hasta más evocador, llamarle "El Niño de los Ancares". En todo caso, estamos ante un gran ópera prima que, con toda seguridad, no será la última.

sábado, 9 de febrero de 2008

LA CARRERA HACIA EL 9-M DESDE EL CÓRNER: ESPAÑA, ESPAÑA, ESPAÑA

Sábado, 9 de febrero. Mitin de Mariano Rajoy, acompañado por toda la plana mayor del PP, en el Pabellón Municipal de Alacalá de Henares. Presuntamente para presentar el programa electoral, aunque el texto no aparece por ningún sitio, más allá de las propuestas que irán desgranándose en los discursos. Estamos en el corazón del Corredor del Henares, en el corazón de lo que un día pudo llamarse el cinturón rojo de ciudades proletarias en torno a la capital. Aquí, en esta ciudad que hoy gobierna el PP con mayoría absoluta, hace 25 años había una corporación municipal en la que 21 de los 27 concejales eran de izquierdas. Cómo hemos cambiado, cuántas vueltas da la vida.
Y podría pensarse, después de las propuestas sobre la inmigración, que Rajoy ha venido a meterse en la boca del lobo, porque en esta villa -gloria de la lengua y la cultura, según orgullosa proclamación de su himno- viven de 30 a 40.000 inmigrantes censados. Pero no, el ambiente es de champions, de fe en la victoria sin sombra de duda. A por ellos, oe; a por ellos, corea la masa enfervorizada cuando el líder se coloca delante del atril.
- Que son pocos y nada buenos-. Remacha un Rajoy que se despedirá asegurando que "vamos a ganar, no os quepa la menor duda, vamos a ganar".
El ambiente lo han ido caldeando el Alcalde, que desempeña a pedir de boca su papel de anfitrión; Juan Costa, que mejora día a día como mitinero; y Esperanza Aguirre, cada día más segura del terreno que pisa. "Tenemos mejores principios, mejores programas y mejores candidatos que los socialistas", asegura la Presidenta de la Comunidad de Madrid. Aguirre se mete a la gente en el bolsillo cuando les recuerda, con una sonrisa picarona, que ella ya le avisó a ZP de que no se presentara por Madrid, porque "Mariano le iba a dar una paliza de las que no se olvidan". Un adversario temible esta Esperanza Aguirre, que para nada tiene el gesto agrio, según dijo Ruíz Gallardón en el entierro de la sardina. Un adversario temible que a mí no me da miedo. Al contrario, me cae muy simpática, porque me gustan los liberales a calzón quitado: así estarán mucho más claras las cosas que habré de escribir en este cuaderno de bitácora. Con Rajoy las cosas claras; y con Aguirre, mucho más claras.
Zapatero, embustero. Retumba el pabellón -unas cuatro mil gargantas- cuando Rajoy critica la política antiterrorista y se compromete a no iniciar un proceso de negociación suicida, como el que se ha producido en esta pasada legislatura. En algunos oídos la palabra embustero suena a componenda y blandenguería, de modo que gritan !traidor¡ cada vez que el candidado del PP menciona o alude al inquilino de la Moncloa. También gritan sí acompasadamente cuando Rajoy asegura que España necesita otro Gobierno, un Gobierno serio, previsible, eficaz, fiable, que tenga un proyecto, que no se mueva por ocurrencias, que no dé bandazos y que se ocupe de los problemas reales de los españoles. "Han hablado de naciones, pero nosotros somos un sóla nación de ciudadanos libres e iguales en derechos y en obligaciones", añade el líder popular. Entonces alguien intenta remachar un poco más el clavo y grita "grande y libre", pero Rajoy, gallego sabio, no se deja arrastrar por ese camino tan resbaladizo. También huye Rajoy de los terrenos pantanosos cuando aborda el capítulo de la inmigración. Las costumbres han desparecido del discurso; pero las palabras inmigración y delito aparecen demasiado juntas demasiadas veces. Este pasaje habría que pulirlo un poco más, no vaya a ser que terminemos diciendo que todos los españoles son justos y benéficos y toda criminalidad es achacable a los forasteros. No obstante, Rajoy lleva razón, y los asistentes se lo reconocen con fuertes aplausos, cuando dice que la "inmigración debe ser legal y ordenada" y que la clave de la integración está en garantizar los mismos derechos, las mismas obligaciones y las mismas oportunidades para todos.
ZAPATERO REGALA 400 EUROS; RAJOY REGALARÁ 30.000
En el terreno económico, según el líder del PP, tenemos la desgracia de "un Gobierno superado, sin norte, sin ideas, que no sabe qué hacer con la economía de este país después de haber derrochado la magnífica herencia que le dejaron los gobiernos anteriores, del PP". Uno de los motivos mayores de crítica es el "regalo" de 400 euros prometido por ZP a todos los contribuyentes del IRPF, sean ricos, pobres o mediopensionistas. A Rajoy le escandaliza que su adversario vaya a dar esos 400 euros lo mismo al que gana 10 ó 12.000 euros, que al que gana un millón de euros. El ejemplo no es muy afortunado, porque el líder popular parece no darse cuenta de que, con la reforma fiscal que ellos están prometiendo ( rebaja del tipo máximo desde el 43 al 40 ), al del millón de euros le van a "regalar" no 400, sino 30.000 euros anuales. Sin embargo, ¿quién se pone a echar cuentas en un mitin? Hay que ser un excéntrico incurable, como yo, para ponerse a hacer eso en un mitin. Lo que se espera de la gente que va a los mitines es que bata palmas y que agite las banderas. Lo demás no es de su incumbencia. Rajoy también recuerda que dejará exentos del IRPF a los que ganen menos de 16.000 euros, pero no explica detalles ni tampoco qué pasara con los que ganen 17.000.
El mitin de Alcalá ha coincidido con el lanzamiento público de la Plataforma de Apoyo a Zapatero, que promueven intelectuales y artistas de izquierdas. Rajoy les alude sin muchas contemplaciones: "los que apoyan a Zapatero son los del canon digital y yo voy a quitar el canon digital". Puede que lo intente, pero entonces se le echará encima la Europa que lideran los señores Sarkozy y Merkel, ya que el canon digital existe porque existe una directiva europea. La propia portavoz del PP en temas culturales, Beatriz Rodríguez Salmones, se encargó de recordarlo durante el debate celebrado en el Congreso unas semanas antes del Decreto de disolución de las cámaras. Pero esto es la campaña electoral, amigos. Después del 9-M ya llegará el tío Paco con las rebajas.

jueves, 7 de febrero de 2008

LA CARRERA HACIA EL 9-M DESDE EL CÓRNER: SOBRE URBANIDAD Y BUENAS COSTUMBRES

Algunas costumbres de los españoles no me gustan lo que se dice nada. Como todo el mundo sabe, una de las tareas ineludibles de los padres es hacer de taxistas a tiempo parcial para los hijos. El otro día hube de llevar a una de mis hijas y a sus amigas a Valdeavero, en la frontera nordeste de la Comunidad de Madrid con la Comunidad de Castilla la Mancha. Tenía que esperarlas un buen rato, así que busque un bar, pedí un gin-tonic y me dispuse a leer los periódicos del día. Había allí un grupo de caballeros comentando los problemas de un coto de caza que tienen en el término municipal. Al día siguiente el otorrino me dijo que mi oído derecho había sufrido un shock traumático por exposición prolongada a un ambiente de altos decibelios. Además de taxista a tiempo parcial, soy un fanático de los trenes de cercanías. Y una de las costumbres más odiosas que observo en los vagones -perfectamente asimilada ya por los inmigrantes- es la que tienen muchos viajeros de poner sus sucios zapatos sobre los asientos que luego tendrán que usar otros viajeros. Cerca de mi casa, hay una gasolinera junto a una avenida de cuatro carriles. Muchos conductores -no uno ni dos, muchos- entran a repostar saltándose las dos líneas contínuas - dos líneas contínuas, dos- que separan los sentidos de circulación. Y lo hacen para no tener que recorrer los 50 metros que separan a la gasolinera de una rotonda, donde podrían hacer el cambio de sentido sin saltarse a la torera el código de tráfico.
Esto es España, amigos, así somos los españoles. ¿Son estas las costumbres que habrán de adoptar obligatoriamente los que vengan a vivir con nosotros? ¿Serán otras? ¿Cómo decidiremos qué costumbres merecen preservarse y ser impuestas? ¿Propondrá el PP una subcomisión parlamentaria para que estudie el asunto? ¿Crearemos también unos tribunales especiales para juzgar a los que no se hayan adaptado adecuadamente? Al final lo que hemos descubierto es que detrás de las propuestas de Rajoy lo que hay es el miedo al velo, el rechazo un poco irracional a la diferencia que el velo representa, la pretensión utópica de que las diferencias pueden borrarse mediante decretos. A lo mejor podría servirnos de algo la experiencia de las dictaduras comunistas, que también creyeron -véase el caso de Polonia- que los sentimientos religiosos de la gente podían borrarse por el expeditivo procedimiento de proclamar que la religión es el opio del pueblo y, en consecuencia, abolirla de las escuelas. Humo y xenofobia es lo que hay detrás de ese "contrato para la integración", según el diagnóstico certero que ha hecho Alfredo Pérez Rubalcaba.
LOS BUENOS SOMOS NOSOTROS; LOS MALOS SON ELLOS
Esa tendencia a creer que todos los bienes están en nosotros y todos los males ("las urgencias están colapsadas por culpa de los inmigrantes", Arias Cañete dixit ) en los que vienen de fuera la llevamos inscrita en los genes por lo menos desde cuando vagábamos por el planeta en busca del fuego. Pero creíamos que siglos y siglos de civilización nos habían enseñado a mantener dormida la bestia que llevamos dentro, a comportarnos con un poco de decencia y de racionalidad, con un poco de sentido común, tal como reclama una y otra vez Rajoy en sus intervenciones parlamentarias. ¿Está el PP en contra de la civilización? Dan ganas de pensar que sí, a la vista de las propuestas tan primitivas, tan injustas, tan insolidarias que ha presentado para afrontar los problemas de la inmigración.
No hace mucho, en una excursión campestre, fuimos a dar con una aldea que tenía un hermoso frontón presidiendo la plaza. En una de las paredes de aquel frontón estaba escrita, en letras azul añil, esta advertencia: al forastero que venga a pretender, le cuesta la moza 500 pesetas. Está claro que la "pintada" no era de ayer ni de antesdeayer, pero es un buen reflejo de esas pulsiones primarias, irracionales, de rechazo al que viene de fuera, pulsiones difíciles de mantener a raya, como la mala hierba. España, esta España que amamos aunque algunas de sus costumbres no nos gusten nada, se quitó el hambre gracias a la emigración y prosperó, a partir de los años sesenta del siglo pasado, gracias a las divisas que traían los extranjeros. Y no puede decirse, sin faltar a la verdad, que aquellos extranjeros, aquellos primeros turistas, tuvieran a su servicio unos camareros de extraordinaria preparación profesional. Más bien al contrario, porque quienes les atendían eran jóvenes que acababan de desertar del arado. Deberíamos recordar esto, deberíamos recordarlo siempre - querido Miguel Arias Cañete- antes de abrir la boca.
Termino mi reflexión con otra anécdota personal. En el año 82, cuando todavía estábamos muy lejos de ser un país rico reacio a compartir su riqueza, un grupo de amigos hicimos un viaje a París. A la vuelta se nos averió el coche en una localidad llamada Chateaudum. Mientras esperábamos la reparación, trabamos amistad con un inmigrante español, de la provincia de Ciudad Real, que, veinticinco años después de su llegada a Francia, seguía echando pestes de la costumbre local de acostarse demasiado pronto y levantarse muy temprano. Aquel hombre era incapaz de pronunciar una palabra tan sencilla como voiture, y seguía hablando de la vatúa cada vez que se interesaba por los avances de la reparación. ¿Cuál tendría que haber sido nuestra reacción si un desalmado hubiera propuesto expulsarlo de Francia, dada su manifiesta incapacidad para adaptarse al idioma y las costumbres francesas?
Menos mal que, al día siguiente de este patinazo con la integración de los inmigrantes, Mariano Rajoy enderezó de nuevo el rumbo con la promesa de plantar quinientos millones de árboles. Eso suena mucho mejor, don Mariano, aunque todos sepamos que no se plantará ni una quinta parte en caso de ser usted el inquilino de la Moncloa.

miércoles, 6 de febrero de 2008

LA CARRERA HACIA EL 9-M DESDE EL CÓRNER: NUBARRONES OSCUROS CASI NEGROS


Miércoles, 6 de Febrero. Desayuno con Josep Antoni Durán i Lleida en la cafetería del Congreso. El encuentro con los periodistas parlamentarios se produce apenas unas horas después de la última catarata de malos datos económicos. Se está destruyendo empleo a un ritmo de más de cuatro mil personas por día, las bolsas vuelven a desplomarse, cae la confianza de los agentes económicos y aumentan los temores de los ciudadanos a que hoy estemos peor que ayer pero mejor que mañana. Durán es uno de los grandes de la política española actual y me hace recordar a uno de los grandes de todos los tiempos: Sir Winston Churchill. El premier británico, cuando las oleadas de aviones alemanes cruzaban cada noche el Canal para sobrecoger el ánimo de los isleños, escribió en uno de sus discursos: pobres gentes, esperan de mí palabras de consuelo y de esperanza y sólo puedo ofrecerles sangre, sudor y lágrimas.
Por fortuna, lo que ahora tenemos enfrente no son los experimentados y heróicos pilotos de la Lutwafe, sino sólo la amenaza -real, aunque improbable- de una recesión; y Durán nunca será candidato al Nobel de Literatura. Así que sus palabras son de malos augurios, pero no llegan al dramatismo de las de Churchill. El cabeza de candidatura de CIU por Barcelona asegura que vienen tiempos muy difíciles; y no hay que ocultárselo a la ciudadanía. Hay que decirles a los ciudadanos que hará falta esfuerzo, que habrá sacrificios y que tendrán que apretarse el cinturón. Ni Solbes ni Pizarro son fiables para recuperar la confianza del tejido industrial español, porque el PP y el PSOE lo que están haciendo con sus promesas es engañar a los electores. Le pregunto a bocajarro si necesitamos vitalmente que el próximo Ministro de Economía sea de CIU, pero Durán me hace una finta de esas que les parten la cintura a los centrales: no necesariamente el responsable de la economía española tiene que ser de CIU, pero, como la experiencia ha demostrado, las políticas que habrán de aplicarse no son las del PP o el PSOE, sino las que tan tenazmente viene defendiendo CIU desde siempre. Durán cree que el protagonismo de los temas económicos irá en aumento a medida que nos adentremos en la campaña electoral; y cree que los malos datos que le están lloviendo al Gobierno tendrán consecuencias. Al final del desayuno acepta la propuesta de escribir en mi cuaderno de tapas rojas su "porra" de resultados para el 9-M. Me comprometo a no desvelarlo hasta el 10-M y a invitarle si ha conseguido dar en la diana. No arriesgo mucho, el café sigue a 73 céntimos de euro en la cafetería del Congreso de los Diputados
LLUEVE DE TODO MENOS AGUA
Mientras caen chuzos de punta sobre el panorama de los datos macroeconómicos y también sobre las pequeñas economías domésticas, los rebaños han comenzado a pastar en el fondo cenagoso de los embalses. No cae una gota de agua y hay que hacerse a la idea de que tendremos problemas con el abastecimiento. El Mar de Castilla ha desparecido: los embalses de la cabecera del Tajo están al 11 por ciento de su capacidad. Y de nuevo el trasvase del Ebro se coloca en primer plano de la actualidad, porque los populares aragoneses y valencianos no se ponen de acuerdo sobre si deben llevarlo o no el programa. Durán i Lleida lanza un aviso para navegantes: nadie, nunca más, podrá contar con ellos para impulsar el trasvase del río que nos nombra. Y mientras dice esto, me acuerdo de La Bullonera, un grupo aragonés que en tiempos era casi tan famoso como José Antonio Labordeta. También eran partidarios de las albadas guerreras y cantaban cosas como esta: Hay que coger el Ebro,/ y otros ríos,/ y aplacar con sus aguas/ tantos estíos. De acuerdo, cojamos todos los ríos y convirtamos Los Monegros en el Jardín del Edén. El problema es qué hacemos luego con las fresas, los tomates, las lechugas y las zanahorias. A quién se lo vendemos. A lo mejor ahora, con las esperanzas del futuro depositadas en los biocombustibles, ese dilema de los excedentes de producción ya no existe. En todo caso, Durán y CIU vienen proponiendo desde hace tiempo levantar la mirada hasta las aguas del Ródano. A lo mejor sería conveniente echar algunos números, pero no hay razón para pensar que, si los ingenieros del XIX fueron capaces de levantar el Canal de Isabel II, los ingeneieros del XXI no vayan a ser capaces de traer el agua desde los Alpes hasta el Cabo de Gata.
PERIODISTAS QUE SE PASAN A LA POLITICA
Desde siempre he pensado que el periodismo y la polìtica son dos pasiones muy próximas, de contínuo rozándose la una a la otra, pero radicalmente incompatibles. Y no sólo imposibles de simultanear en el tiempo, sino muy peliagudas a la hora de emprender tránsitos de ida y vuelta entre ellas. A los periodistas nos gusta publicar cosas, tendemos a dejar por escrito la huella de nuestros gustos, nuestras opiniones, nuestras filias y nuestras fobias. Y nos gusta alimentar nuestra vanidad consiguiendo el mayor número posible de lectores. El precio que hay que pagar a cambio es tener siempre las hemerotecas sobre nuestras cabezas, como un espada de Damocles de la que no es posible librarse. El Partido Popular acaba de llevarse un disgusto con uno de sus candidatos al Senado por la provincia de Albacete. Dimas Cuevas era periodista y gastaba muchas toneladas de sal gruesa en sus comentarios presuntamente jocosos sobre gays y lesbianas: Las bodas de lesbianas tendrán que incluir diversas variedades de tortillas; y los convites para homosexuales serán a base de perritos calientes y plátanos al horno. La sal gruesa ha comenzado a causar grandes escozores en los cuarteles generales del PP, que no ha tenido más remedio que pedir disculpas por las opiniones de su candidato. Es posible que el bueno de Dimas, mientras escribo estas líneas, esté meditando sobre la conveniencia de presentar la renuncia. Otra periodista incorporada a las candidaturas para el 9-M es Pilar Marcos, que trabajó durante muchos años en El País y ahora trabaja en la FAES, de José María Aznar. Puede que haya muchos más casos por toda la piel de toro, pero estos dos son los que conozco. Pilar Marcos, tertuliana en RNE, decía la otra mañana que el hecho de figurar en el puesto veintintantos de la candidatura del PP por Madrid no significa que no conserve en todo su esplendor su independencia de criterio. Querida Pilar, desde el cariño inmenso que te profesamos, eso sí que no nos lo creemos. O se hace periodismo o se hace política o se calla uno. En este ámbito no es de aplicación aquel famoso bolero -Corazón loco- según el cual es perfectamente posible amar a dos mujeres a la vez y no estar loco.

domingo, 3 de febrero de 2008

DESDE EL CÓRNER: EN LA CARRERA HACIA EL 9-M

Sábado, 2 de Febrero. Todavía sufro los efectos de la resaca de la fiesta inolvidable que me ofrecieron los compañeros con motivo de la prejubilación. Pero hay que volver al tajo, sin tregua y sin más fuente de inspiración que lo que pasa en la calle, como recomendaba don Juan de Mairena. Con mucha frecuencia me quejé, en mi vida anterior, de los boletines horarios de noticias. Esa máquina de picar carne de periodista, solía decir. Es increíble, sin embargo, la añoranza que sienten los carniceros de verdad cuando les dicen que se acabó la tarea de preparar primorosamente las bandejas de carne picada, mitad vacuno y mitad porcino o pollo. Esto lo sé porque yo visito la galería comercial con frecuencia, no sólo cuando hay elecciones, como los políticos. Así que, preventivamente, me he fabricado esta picadora artesanal que ahora debo alimentar. Con cuidado, eso sí, de no pillarme los dedos.
Ciberespacio y conspiraciones de sacristía. Estos dos extremos parecen delimitar el campo en que se mueven los políticos en busca del voto. La polémica destada por la nota electoral de los obispos y cardenales ha coincidido con la oferta lanzada por Microsoft para hacerse con Yahoo! El miedo guarda la viña, dice la sabiduría popular. Los prelados de la Iglesia Católica dan la impresión de estar temerosos de perder su negocio, basado en el control de la almas; y los directivos de Microsoft - ya sin Gates en el puente de mando- están temerosos de acabar no pintando nada en el mundo de Internet frente al gigante Google.
Las reacciones al comunicado de los obispos han sido las que cabía esperar. El Presidente del Gobierno les ha reconocido el derecho que tienen a pedir el voto para el PP, pero les reprocha que hayan "caído en la tentación de utilizar el terrorismo en campaña electoral; y a eso no tienen derecho". El Presidente del PSOE, el andaluz Manuel Chaves, ha ido un poco más lejos y asegura que ese pacto no escrito de las altas jerarquías de la Iglesia con los populares "condicionará el futuro de las relaciones con el Gobierno".
A cinco semanas de la cita con las urnas, el PSOE cree tener ante sí el escenario que tanto temía José Bono en su discurso del Siglo XXI, donde recomendó "no topar" con la iglesia bajo ninguna circunstancia. También pudiera ocurrir que los temores del ex-Presidente de Castilla-La Mancha fueran completamente infundados y que al partido del Gobierno no le venga nada mal este escenario, en el que obispos y cardenales pueden acabar haciendo el mismo trabajo que hicieron Aznar y sus portavoces en las jornadas trágicas del 11 al 14 de Marzo de 2.004. Hay quien sostiene que, en España, las elecciones no las deciden los dos millones de votantes centristas que dudan entre coger la papeleta del PP o la del PSOE, sino los dos millones de votantes izquierdistas que dudan entre quedarse en su casa o coger la papeleta del PSOE. Ya veremos. De momento, el portavoz de la Conferencia Episcopal, Martínez Camino, ha hecho un esbozo de rectificación o matización: la Iglesia no dice que no se pueda hablar con los terroristas, sólo dice que no se puede negociar con ellos. Hilar fino, se le llama a esa figura, pero los jesuitas -y Martínez Camino lo es a fondo- si de algo tienen fama es de ser finísimos zurcidores de filigranas dialécticas.
LOS DEBATES TELEVISIVOS, EN EL AIRE
Nos las prometíamos muy felices con los debates cara a cara entre los dos principales candidatos a la Presidencia del Gobierno. Lo nunca visto en España, si exceptuamos aquellos dos que celebraron Felipe González y José María Aznar en 1.993. Pero ya han comenzado las excusas de mal pagador. Ya sabemos que España no es un país normal. Si fuera un país normal, todo el mundo estaría de acuerdo en que la señal de esos dos debates debe producirla la Radiotelevisión pública, que para eso la pagamos entre todos los ciudadanos, y ofrecer esa señal a todas las cadenas que quieran emitirla. Pero, anormales y todo, todavía somos muchos los que sabemos distinguir entre lo decente y lo indecente. Y el empeño del PP en marginar a TVE para favorecer a Tele 5 y Antena 3 es una indecencia. Espero que el Presidente del Gobierno evite, al precio que sea, una puñalada trapera como esa.
Hablábamos más arriba de la coincidencia en el tiempo de nuestra precampaña electoral con el lanzamiento de operaciones empresariales de enorme envergadura en Internet. Coincide además que una gran parte de los esfuerzos propagandísticos se están llevando a cabo en los dominios del ciberespacio. Los creativos de todas las formaciones políticas se estrujan las neuronas para ganarse el favor de los internautas, considerados por consenso como la vanguardia modernizadora del país. Muchos hemos recibido una llamada de Mariano Rajoy preguntando, en tono apremiante, dónde nos habíamos metido; y ofreciendo su página Web para que expongamos nuestras ideas.
- Nos habíamos metido en las listas de espera del confesionario, don Mariano. Estábamos haciendo examen de conciencia antes de confesar que nunca hemos hecho caso de los mandatos y admoniciones de la Santa Madre Iglesia en el ejercicio de nuestro derecho al voto. Pero lo hacíamos sin la debida contrición y sin manifestar propósito de la enmienda.